Jamaica es como un pedacito de mundo lleno de diferentes cosas y mucha energía. A los europeos les encanta venir aquí para vivir aventuras emocionantes. Pero, curiosamente, a los latinos no les ha llamado tanto la atención. En esta isla del Caribe, puedes encontrar de todo: playas con agua súper clara, montañas gigantes y ciudades llenas de movimiento. En este artículo te compartiré algunas cosas que te recomiendo hacer en tu visita a Kingston
Un poco sobre Jamaica
Nuestra aventura por Kingston empieza en el Parque de la Emancipación. Este parque es el escenario que da la bienvenida a todos los visitantes y, de aquí me gustó particularmente el hecho de que todos los árboles estuviesen identificados con su nombre y país de origen. Además, tiene una pista de carreras que demuestra la afición de los jamaicanos por la velocidad. Y es que correr es más que un ejercicio físico aquí, es una parte vital de su cultura. No es de extrañar que de estas tierras surgieran gigantes velocistas como Usain Bolt, el relámpago humano que dejó asombrado al mundo con su récord de 100 metros en 9.6 segundos.
Jamaica fue descubierta por Cristóbal Colón en 1494, y los españoles la dominaron por aproximadamente 200 años. Tiempo después, Inglaterra fue quien se quedó con este país caribeño y es por eso que el inglés es su idioma oficial. Sin embargo, te sorprenderá descubrir que la población local también habla un idioma propio: el jamaicano, que, aunque domines el inglés, te puede resultar desconcertante, pues es bastante extraño para nosotros.
El dólar jamaicano es la moneda oficial de este rincón caribeño. Si buscas dónde hospedarte, cerca del Parque de la Emancipación hay varios hoteles de lujo, sin embargo, en mi estadía decidí alquilar un Airbnb que me costó aproximadamente $30 por noche. Y, si quieres moverte por la ciudad, siempre tienes la opción de caminar, pero debes tener en cuenta que las temperaturas deben rondar los 28 a 30 grados Celsius, por lo que lo más recomendable será que uses Uber, donde una carrera te costará aproximadamente 500 dólares jamaicanos (3 dólares estadounidenses).
Visitar el museo de Bob Marley
Aquí en Kingston hay un museo muy especial dedicado a Bob Marley, el famoso músico. Pero aquí no es solo un museo, es la casa donde vivió durante 7 años. La entrada al museo tiene un costo aproximado de 25 dólares americanos por adulto.
Durante mi visita, conocí a Sean, el conductor de Uber que me llevó allí. Me sorprendió descubrir que Sean nunca había estado en esa casa, lo cual me hizo pensar en cuántas veces nosotros, como habitantes de un lugar, dejamos pasar la oportunidad de explorar los sitios que los turistas encuentran emocionantes. ¿Te ha pasado? ¿Hay lugares en tu ciudad que aún no conoces y te gustaría visitar?
El tour por la casa de Bob Marley fue muy interesante. Después de recorrer la parte de arriba de la casa, llegamos a una cocina que guarda una historia curiosa. Resulta que en 1976, durante los problemas políticos en Jamaica, intentaron asesinar a Bob Marley y a algunas personas de su equipo, incluyendo a su esposa. Afortunadamente, todos sobrevivieron, pero aún se pueden ver los impactos de bala en este lugar. Así termina el tour, que dura unas dos horas.
El recorrido fue bastante chévere. Nos llevaron a su habitación, donde vimos su cama y su guitarra favorita encima de ella. Algo que desconocía sobre Bob Marley es que le gustaba meditar. Incluso en su habitación hay un tapete y un cojín en los que solía hacerlo, al igual que en el primer piso del estudio de grabación.
La parte final del tour fue un documental de unos 30 minutos sobre su vida. Después, nos dirigimos a la tienda de souvenirs y, justo afuera, pudimos tomarnos fotos con su carro: un camión de color azul bebé. Ese es el único lugar donde está permitido tomar fotos. Me gustó mucho poder conocer sobre la vida de Bob Marley, su cuarto, su conexión con la meditación y la música.
Otros lugares para visitar en Kingston, Jamaica
Si visitas Kingston, no te puedes perder Devon House. Es una mansión genial construida por 1881, pero ahora es famosa por tener varios restaurantes y hasta un spa, por lo que puedes pasar ahí todo el día. Hasta tienen una panadería donde fuimos a comer. Ese lugar es tan popular que hasta los locales lo visitan.
Me dio hambre y decidí probar una comida típica muy buscada en Jamaica: se llama “party”. Es como un pastelito de hojaldre relleno de diferentes tipos de carne, pero este en particular llevaba curry goat, un curry hecho con carne de cabra. Y te cuento, estaba delicioso y me recordó un poco a los sabores de la India. Por otro lado, si te gusta comer pescado, tu imperdible será visitar el Puerto Real, ya que allí lo preparan muy bien.
Por último, te recomiendo mucho visitar el Distrito de Arte en el centro de la ciudad. Ahí, aproximadamente tres cuadras están llenas de murales preciosos. Hay algunos de Bob Marley, otros de danzas típicas, y hasta uno sobre la cultura india. Me parece un lugar perfecto para tomarte fotos, pero no te alejes mucho, ya que cerca de allí mismo hay una zona algo insegura donde incluso los locales nos recomendaron guardar nuestros celulares.
No hay demasiadas cosas que puedas hacer en Kingston, Jamaica. Sin embargo, la cordialidad de los jamaicanos me abrazó desde el primer momento, lo que enriqueció mi estancia. Mi parte favorita de este viaje fue visitar el museo de Bob Marley. Ver su cama, su habitación y hasta el camión del que fue dueño me parecen una experiencia que vale la pena probar.
Recuerda que puedes ver un poco más de mis viajes y mi recorrido por el mundo en mi canal de Youtube y mi cuenta de Instagram. Sin embargo, puedes ver el video de este destino en específico haciendo clic aquí.
