¿Me creerías si te digo que puede que estés viviendo en uno de los museos destechados más valiosos del mundo? La mayoría de los caraqueños vamos en modo automático, de un extremo de la ciudad a otro sin percatarnos de la galería permanente que nos regalaron Jesús Soto, Pedro Zapata, Alejandro Otero, el maestro Cruz Diez o Wolfang Salazar, mejor conocido como Badsura.

Basta con detenerse un momento para disfrutar del clásico arte de las obras y las esculturas que engranan perfectamente con las maravillas naturales que nos rodean. Las calles de Caracas están llenas de arte, en esta ocasión, decidí compartirte las más icónicas para que la próxima vez que la recorras, no dudes en detenerte a observarlas:

La Esfera de Soto

La autopista Francisco Fajardo no sería la misma sin la conocida “Esfera de Caracas”, o como solemos llamarle los venezolanos, Esfera de Soto, en honor al artista plástico detrás de esta maravilla cinética: Jesús Soto.

Fue inaugurada en el año 1996 y desde entonces se ha convertido en un símbolo de la ciudad. Estuvo desnuda y apagada por mucho tiempo, pero fue restaurada en dos ocasiones.

Hoy en día, esta obra es la protagonista del distribuidor La Carlota. Su ubicación garantiza una vista de 360 grados que te impresionará durante el día con su color vibrante y una impresionante sensación de movimiento y cuando cae la noche, con su esplendor (producto de un sistema de iluminación).

Una obra de arte de esta envergadura no está puesta allí por casualidad, también está para vivirla de cerca. Por esta razón, está rodeada de banquitos donde los citadinos pueden acceder a ella como un espacio de esparcimiento.

El Proyecto Viarte

En ambos sentidos de la autopista Francisco Fajardo se encuentran varias estructuras artísticas decorando la vía. Entre ellas, la “Cayena” de Luben Damianoff y la “Flor Sideral” de Rafael Martínez. Frente al Centro Comercial Ciudad Tamanaco en Chuao, se puede observar otra que lleva por nombre “Fragmento de Lluvia para Caracas” por Carlos Medina.

Fueron instauradas en el año 2014 como parte del “Proyecto Viarte”, una iniciativa que pretendía hacer del arte algo cotidiano para los ciudadanos. En mi memoria atesoro el brillo de esos “Fragmentos de Lluvia” cuando recién fueron instalados en la zona. Tristemente, en la actualidad están un poco deterioradas.

Fuera de las vías hay todo un universo por conocer, pues en las calles más transitadas de la ciudad también hay lugar para el arte. En el puente de Las Mercedes se ubica una estructura llamada “Multiversos” de la autora Sydia Reyes. Una obra que pudo haber sido un espectáculo en los años 50 cuando el río Guaire —que atraviesa toda Caracas— estaba en su máximo esplendor.

Las Fisicromías de Cruz Diez

De las creaciones de Cruz Diez, es probable que la mayoría de los venezolanos recordemos el emblemático piso del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía o las Cámaras de Cromosaturación que más de una vez nos han envuelto en un ambiente monocromo absoluto.

Si bien es cierto que estas genialidades del maestro Cruz Diez son un clásico de nuestra cultura, hay muchísimos otros espacios de la ciudad donde este personaje ha dejado su huella. Tal es el caso de la Fisicromías Doble Faz ubicadas en Centro Plaza (Altamira) y en Plaza Venezuela, dos espectáculos armónicos e intensos de abstracción cromática que consisten en una serie de líneas rigurosamente continuas y programadas con la intención de generar efectos ópticos en la retina a través del color.

El Mural de Zapata

El centro de la ciudad, a la altura de la Universidad Central de Venezuela, está firmado por Zapata. Con una vista panorámica elaborada en cerámica, donde involucra a cinco personajes icónicos de la historia venezolana (Simón Bolívar, Simón Rodríguez, Teresa de la Parra, Armando Reverón y José María Vargas), el artista le recuerda a cada venezolano que transita por la autopista Francisco Fajardo que debe ser el conductor del país donde sueña vivir.

El mural “Conductores de Venezuela” de Pedro León Zapata fue construido en el año 1999 en una de las paredes externas del gimnasio de la UCV para el deleite de la vista de los transeúntes de la autopista.

Badsura por doquier

Retratos, cubismo, colores y mucha reflexión en Caracas: eso ha plasmado Wolfang Salazar, un artista venezolano que ha dedicado años de su vida a crear luz entre las sombras y a devolver sonrisas a los venezolanos con sus ocurrencias.

Detrás de todas esas composiciones que le dan color a las calles de Caracas y a muchos espacios en blanco del mundo, hay una persona observadora y perseverante que sigue plasmando historias y problemáticas sociales, aunque le hayan borrado más de un mural.

Comenzó haciendo solo graffitis y con el pasar del tiempo, fue construyendo su propio proceso creativo y edificando una propuesta completamente autóctona. Le ha dado vida a artistas musicales como Óscar D’León y el gran Simón Díaz, a deportistas e incluso a personajes de la penumbra.

El Abra Solar de Alejandro Otero

Esta imponente obra de arte cinético forma parte del conjunto escultórico urbano de la Plaza Venezuela. Está hecha de metal y aluminio y fue construida en los años 80. En mi estadía por la zona, pude observar que a las áreas verdes que rodean la construcción también les hace falta mantenimiento.

Luego de esta experiencia fue que pude detallar las piezas faltantes en esta y muchas obras de mi ciudad. En definitiva, es necesario que conozcamos estas creaciones invaluables para que aprendamos a quererlas y valorarlas.

¡Espero haberte regalado una dosis de cultura en estas líneas! Si quieres apreciar estas reliquias con tus propios ojos, puedes ver mi vídeo completo haciendo clic aquí.